
La vid, como cualquier otra planta, necesita de ciertos cuidados desde su plantación hasta el momento que de sus frutos. Requiere de ciertas condiciones climatológicas para su correcto desarrollo que concluya en frutas deliciosas y nutritivas.
Existen tres factores fundamentales para la plantación de la uva:
– Asoleamiento: Importante para la acumulación de azúcares en el fruto.
– Precipitaciones: Las necesidades de agua se encuentran entre los 300 mm y 600 mm.
– Suelo: Se puede acomodar a distintos tipos de suelos, desde el más árido hasta el más fértil. Sin embargo, prefiere los suelos franco-arenosos, con suficiente materia orgánica, drenados y con nivel de pH de 5.5 a 7.